Corazón roto

Es increíble las lecciones que el corazón te puede dar alguna vez cuando ya pensabas que nada iba a sorprenderte en ese tema. Sería una estupidez pensar que todo lo que pasa es casualidad, las cosas siempre pasan por algo, para algo, con un sentido...

Estúpido corazón... ¿por qué tuviste que saltar aquel día? ¿por qué tuviste que dar esperanzas a alguien que ya estaba roto por dentro? ¿por qué no me dejaste vivir en la ignorancia de quien es más feliz cuanto menos sabe?

Las cosas estaban bien. Lo tenía todo... bueno, más bien creía que lo tenía todo pero entonces me quité la venda de mis ojos y vi que mi alrededor era de cartón y de arena, que con un soplo de molesto viento me quedaría sin nada y ese soplo llegó.

Llegó con nombre y apellidos (aunque estos últimos no los conozco), con rostro, sonrisa y ojos. Esa mirada que me congeló e hirió de muerte en muy pocos días.

Estúpida.

Nunca se debería menospreciar el valor de un segundo, de un instante porque cuando quieres darte cuenta... se esfuma, desaparece como si nunca hubiera existido y entonces llega el peor mostruo de todos.

La soledad...