martes, 23 de marzo de 2010

Mitológicamente hablando (3) Helena de Troya

Mitológicamente hablando es una sección en la que la mitología y la literatura se entrelazan, contaré anécdotas de personajes mitológicos e intentaré transmitir historias de interés para todos.




Mi cuaderno vuelve a resurgir con esta sección ligeramente abandonada pero tengo una razón de peso para ello ya que quería hacer un post ligeramente más interesante que el anterior y que abarcara uno de los temas más conocidos de la mitología griega: los amores de Zeus con todo tipo de mortales y diosas.

Pensando en ese tema llegué a una conclusión muy simple: si me ponía a hablar de los amores de Zeus así sin más, podía salirme un post inmenso que ni yo iba a leerme por lo que decidí acercaros al tema desde una de las historias más conocidas que es la de Helena, a fin de enlazar también con el post anterior que trataba de dos personajes muy conocidos de la Ilíada.

Y sin más... empiezo con la historia mitológica:



Helena siempre ha sido considerada en la mitología como la MUJER más bella de la historia, se han hecho referencias a ella en obras literarias (Fausto de Goethe) y en películas (La Leyenda Mágica de los Leprechauns) siempre resaltando la belleza de este personaje mitológico cuyo origen se remonta a la de los mitógrafos griegos que la colocan en la difícil posición de ser quien provocó la legendaria Guerra de Troya.

Helena tiene dos posibles nacimientos en la mitología griega, uno muy poco aceptado y otro que es el que casi todo el mundo conoce. El primero al que me refiero es el que atribuye la paternidad a Zeus y la maternidad a Némesis (que es la diosa de la venganza y la fortuna) que se convirtieron en cisne y oca para copular, por lo que Helena nació de un huevo que fue entregado a una humana llamada Leda.

La segunda versión que es la más extendida y por tanto aquella que se estudia trata una de las metamorfosis de Zeus. El dios supremo por excelencia del panteón griego se transformó en cisne para seducir a la humana Leda que acababa de casarse con Tindáreo que era el rey de Esparta. Los dos, dios y mortal yacieron con Leda la misma noche y como resultado, Leda tuvo cuatro hijos.

Cuatro hijos repartidos en dos huevos que la misma Leda puso. En uno estaban dos inmortales y en el otro dos mortales, cada huevo contenía los hijos de un padre distinto. De Tindáreo y Leda nacieron Clitemnestra y Cástor, simples mortales. De Zeus y su unión con Leda nacieron Pólux, el hermano gemelo de Cástor y Helena.

Hay alguna historia de Helena en su niñez que incluye al héroe griego Teseo pero yo, sinceramente, no la he estudiado por lo que no puedo hablar de esa historia con conocimiento pero si trasteáis entre los libros de mitología seguro que lo encontraréis fácilmente.

Otro de los grandes hitos de la historia de Helena es su historia con Menelao que comenzó cuando la susodicha llegó a edad casadera (que no sé qué edad será) y empezaron a surgirle pretendientes de debajo de las piedras. Entre ellos hombres respetados como Odiseo o el mismo Aquiles por lo que Tindáreo hizo prometer al hombre que se casara con su hija que iría a rescatarla de encontrarse en algún apuro y Menelao fue elegido por Helena.

Menelao era el hermano de Agamenón de cuya estirpe maldita hablaré en otra entrada por partes (porque es una historia larga) pero aquí sólo diré que Agamenón, quien era rey de Micenas, se casó con la hermana de Helena, Clitemnestra mientras que Menelao se quedó con Helena y se hizo con el trono del padre de la misma, pasando ella a ser Helena de Esparta. De este matrimonio nació una niña cuyo nombre yo no he sabido hasta este mismo curso: Hermíone (¿os suena a algun@?).

Paralelamente a este matrimonio, Afrodita le prometía a Paris el amor de la mujer más bella del mundo que, curiosamente, era Helena. Esta coincidencia nos lleva al gran nudo de la historia de nuestra protagonista: la seducción o el rapto de Paris.

Como parece que siempre ocurre en la mitología, hay varias versiones para un mismo mito y éste no es una excepción pero todas las historias comienzan del mismo modo, Paris es alojado por los reyes de Esparta con su famosa hospitalidad pero en medio de la estancia, Menelao debe viajar a Creta y dejar a su esposa y a su hija con Paris.

A partir de aquí hay varias versiones de lo que ocurrió a continuación. En una, Helena es raptada por Paris y llevada por la fuerza a Troya. La segunda es la de un enamoramiento provocado por Afrodita que hizo que Helena y Paris huyeran juntos de Esparta, dejando sola a Hermíone. Hay una tercera versión, escrita por Estesícoro (poeta griego), en la que rectifica su anterior versión del mito de Helena en la que trata al personaje como adúltera. Se dice que el poeta se quedó ciego por tal historia y que recuperó su vista al escribir que realmente fue un espectro creado por los dioses el que acompañó a Paris a Troya mientras Helena era puesta a salvo en Egipto.

Sobre la Guerra de Troya no diré nada ya que hablaré del tema en otro momento, sólo decir que tras la muerte de Paris, Helena pasó a ser esposa de Deífobo (hermano de Paris) y que tras la derrota de los troyanos contra los griegos, Helena volvió con Menelao a Esparta para retomar el trono que le correspondía desde el principio.


Tras este tostón... ¿qué os ha parecido la historia?

4 comentarios:

Alba Úriz Malón dijo...

Y ahora la gran pregunta: ¿habría existido de verdad alguna Helena de Troya? Todo mito y leyenda nacieron en alguna parte...

Nia dijo...

¿Cómo debe ser la mujer más guapa de la historia? ¿Cómo debió ser Helena, si existió? Esta sección está muy bien, me encanta descubrir cosas nuevas sobre temas mitológicos, sobretodo lo de que Helena salió de un huevo... A mí me gusta más la versión del rapto, es mucho más wraaaww!

Marta Cruces Díaz dijo...

@Alba estoy de acuerdo contigo, siempre hay algo de verdad en estas historias mitológicas, al menos es lo que yo pienso pero el qué es exactamente, ni idea.

@Nia Yo también me pregunto cómo debía ser Helena en el caso de haber existido...

Tempi dijo...

Mmmmm, lo del huevo es un poco crrepy, esa es mi opinión. A mi me gusta más la versión de Helena raptada, porque eso de dejar a su hija, con ese nombre tan mono, está muy feo. ¡Qué ilusa! Hasta ahora yo no sabía nada de que Helena tuviese una hija, yo creía que se había fugado con Paris porque estaba enamorada de él (Menelao era feo y viejo). XD