Considero que es muy difícil hablar de alguien o por alguien, pero me resulta casi imposible hablar de mí. Por eso os hablaré de él, de Drake.
A finales de 2012 me propuse algo de lo que os hablé hace ya mucho, volver a escribir mi novela Drake. Es una novela que para mí significa mucho tanto porque fue la primera novela larga de fantasía que terminé como por la historia en sí. Parece gracioso que hace solo unos días haya finalizado aquel reto que me propuse hace más de dos años y es que no ha sido sencillo.
Primero fue el mundo, coger una hoja en blanco y volver a trazar cómo era Minuscel, como si realmente no tuviera idea de cuál era ese mundo, como si no lo hubiera visitado nunca. Después esos personajes, amigos algunos, enemigos otros, compañeros de viaje completamente nuevos en esta versión y que venían para quedarse. Quería que todo fuera perfecto, que cada pieza encajara exactamente donde debía encajar, que no tuviera incoherencias como anteriormente y que me quedara satisfecha. Eso hizo que proliferaran las tarjetas de personajes, los esquemas de capítulos e incluso de escenas o diálogos, creo que nunca en mi vida he peleado tanto por hacer una trama sin fisuras ni reproches.
28 capítulos de viajes, de descubrimientos, de frustraciones, de personajes que luchan, que ganan, que pierden. Cuando puse punto y final a esta historia apenas podía creérmelo, no porque pensara que fuera incapaz, recuerdo que cuando lo terminé a esas 03:30 de la mañana me pregunté ¿y ahora qué? Después de esto ¿qué más existe aparte de Drake? Ahora que creo que le he hecho justicia después de tantos años puedo cerrar la página, abrir de par en par las puertas a una nueva historia (seguramente compartida) que me vuelva a llenar como esta.
Muchos de vosotros seguramente no sepáis quién es Drake ni porque estas palabras las estoy escribiendo llevada completamente por el sentimiento del momento. Pero espero que algún día le conozcáis, a ese hechicero de ojos violetas que se merece toda la suerte del mundo y que, desgraciamente, no tiene. Espero que por aquí haya quien sí le conozca, bien porque haya leído aquella versión en el foro de Laura Gallego, o porque me haya oído desvariar incontables ocasiones sobre miles de millones de cosas que le ocurren al protagonista. A todos ellos, gracias, porque si nadie lo hubiera leído en ese momento o nadie me hubiera escuchado cuando hablaba de ello, es posible que lo hubiera dejado como ese imposible que me parecía en 2012, esa montaña que escalar a cuya cima no podía ni aspirar.
Aunque esto os lo esté contando a vosotros, lanzando mi mensaje en una botella a este mar que es Internet, realmente soy yo quien necesita leer estas palabras para recordarme que conseguí el reto que me propuse, que conseguí poner punto y final a la historia en la que los amigos no dudan en sacrificarse y donde aunque puedas ver lo que va a ocurrir, el destino nunca está escrito.
En este momento toca parar, dejar que descanse, aprovechar el NaNoWriMo de 2014 para escribir algo sencillito y prepararme para una nueva historia que me emociona. Después tocará volver a leer y corregir, dejar que lean y opinen, y probar suerte.
Sainan di cabren
El dibujo que acompaña la entrada fue realizado por Irilaya.
A finales de 2012 me propuse algo de lo que os hablé hace ya mucho, volver a escribir mi novela Drake. Es una novela que para mí significa mucho tanto porque fue la primera novela larga de fantasía que terminé como por la historia en sí. Parece gracioso que hace solo unos días haya finalizado aquel reto que me propuse hace más de dos años y es que no ha sido sencillo.
Primero fue el mundo, coger una hoja en blanco y volver a trazar cómo era Minuscel, como si realmente no tuviera idea de cuál era ese mundo, como si no lo hubiera visitado nunca. Después esos personajes, amigos algunos, enemigos otros, compañeros de viaje completamente nuevos en esta versión y que venían para quedarse. Quería que todo fuera perfecto, que cada pieza encajara exactamente donde debía encajar, que no tuviera incoherencias como anteriormente y que me quedara satisfecha. Eso hizo que proliferaran las tarjetas de personajes, los esquemas de capítulos e incluso de escenas o diálogos, creo que nunca en mi vida he peleado tanto por hacer una trama sin fisuras ni reproches.
28 capítulos de viajes, de descubrimientos, de frustraciones, de personajes que luchan, que ganan, que pierden. Cuando puse punto y final a esta historia apenas podía creérmelo, no porque pensara que fuera incapaz, recuerdo que cuando lo terminé a esas 03:30 de la mañana me pregunté ¿y ahora qué? Después de esto ¿qué más existe aparte de Drake? Ahora que creo que le he hecho justicia después de tantos años puedo cerrar la página, abrir de par en par las puertas a una nueva historia (seguramente compartida) que me vuelva a llenar como esta.
Muchos de vosotros seguramente no sepáis quién es Drake ni porque estas palabras las estoy escribiendo llevada completamente por el sentimiento del momento. Pero espero que algún día le conozcáis, a ese hechicero de ojos violetas que se merece toda la suerte del mundo y que, desgraciamente, no tiene. Espero que por aquí haya quien sí le conozca, bien porque haya leído aquella versión en el foro de Laura Gallego, o porque me haya oído desvariar incontables ocasiones sobre miles de millones de cosas que le ocurren al protagonista. A todos ellos, gracias, porque si nadie lo hubiera leído en ese momento o nadie me hubiera escuchado cuando hablaba de ello, es posible que lo hubiera dejado como ese imposible que me parecía en 2012, esa montaña que escalar a cuya cima no podía ni aspirar.
Aunque esto os lo esté contando a vosotros, lanzando mi mensaje en una botella a este mar que es Internet, realmente soy yo quien necesita leer estas palabras para recordarme que conseguí el reto que me propuse, que conseguí poner punto y final a la historia en la que los amigos no dudan en sacrificarse y donde aunque puedas ver lo que va a ocurrir, el destino nunca está escrito.
En este momento toca parar, dejar que descanse, aprovechar el NaNoWriMo de 2014 para escribir algo sencillito y prepararme para una nueva historia que me emociona. Después tocará volver a leer y corregir, dejar que lean y opinen, y probar suerte.
Sainan di cabren
El dibujo que acompaña la entrada fue realizado por Irilaya.
2 comentarios:
Lo primero de todo, ¡súper enhorabuena! Sé que han sido muchos muchos años (y más aun de páginas y páginas) de trabajo. Pero bueno, Rothfuss también estuvo unos diez años con alguno de sus libros, ¿no? Ya solo por poder decir "lo he conseguido" creo que ha merecido la pena y seguro que has aprendido muchísimo.
¿Y ahora qué? Pues ahora a luchar igual de insistentemente para conseguir publicarla y que todo el mundo pueda conocer a Drake y tu/su historia. Y por supuesto, ¡a seguir escribiendo!
Hace unos días me acordé de ti y de tu historia, pero no conseguía recordar ni tu nick "Ireth" ni el nombre de "Drake". Ahora estaba leyendo/estudiando y, de pronto, ¡se me encendió la bombilla!
Me alegro muchísimo de leer esta entrada en tu blog y espero pronto poder leer tu novela comprándola en cualquier librería :D
No sé si te sonará vagamente mi nick, fui usuario de los foros de LGG y ReadMania. Hace ya tantos años de aquello...
En fin, seguro que tienes el apoyo de mucha gente cercana, pero espero que este mensaje te anime a seguir en esto. ¡Mucho ánimo!
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