Esta historia comenzó porque escribí un relato corto que me vino a la mente tras ver una imagen de la cual apenas me acuerdo... es una novela sencilla de 135 páginas a interlineado doble que mandé al concurso de edebe de éste año (supongo que sería el premio del 2008 ¿no?). El caso es que no es una historia de la que haya hablado mucho pero me ayudó a mejorar en las tramas.
Hablando en plata sobre mi forma de escribir, tengo la tendencia de centrarme demasiado en los personajes, se vio, poniendo un ejemplo bochornoso, en Fuego y Hielo cuyo argumento cambió radicalmente de la primera a la segunda parte de la novela... ¿por qué? porque me centré en los personajes y quería dejarlos claritos...
Como siempre me pasa, vamos.
En cambio con Drake y con la trilogía de Libros perdidos me pasó lo contrario. Los personajes siguen siendo lo importante de mis historias pero la trama queda bien clara. Como el Las lágrimas de Seryor.
Un brutal asesinato en Hokkaido que causa un gran revuelo. Un personaje llamado Seryor dice ser autor de tal atrocidad afirmando que "Quedan nueve por pagar". ¿Será el principio de una serie de asesinatos brutales del mismo tinte? ¿Quién es realmente Seryor y por qué ha asesinado a un respetable hombre de negocios cuya muerte a dejado a una familia desolada?
2 comentarios:
Esa tendencia tuya al igual que puede ser tu devilidad, tmb es un punto fuertisimo a tu favor. Creo que nunca he visto personajes tan matizados y caracterizados como los tuyos.
Hay veces que incluso hablando contigo llego a pensar que Dunca, Blane etc son personajes completamente reales, que son amigos tuyos con los que quedas cada día. Hablas de ellos de una forma tan natural como si supieras cada pensamiento y acción de cada segundo sde su vida.
Consigues que la gente se identifique con tus personajes y eso es algo que no muchos escritores pueden conseguir, y es una de las cosas que hace que una novela no solo guste leerla sino tambien releerla.
Mi abuela a solía decir que cuando se releia un libro que te gustaba, era como encontrarse con viejos amigos y creo que tu consigues esos efectos.
Porque Duncan, Blane, Drake, Serean, Seryor... pa mi son ya amigos.
No dejes de escribir nunca, sabes que nu te dejaré ;)
PD. Las lágrimas de Seryor es uan novela muy buena que recomiendo leer a quien pueda tener acceso a ella, vale realmente la pena ^^
Asesinatos, intriga, personajes... Entonces la novela promete. Además, Hokkaido es una región bonita, y tú escribes muy bien. Así que cuando acabe lo que me pasaste de Los ladrones, te la pido por msn ^^
Si quieres pasármela, claro xD *aunque, lo dicho, que tardo siglos en leer .___.*
Veamos, le doy la razón a Elmer. Tus personajes están tan caracterizados que son como personas reales. Parece que sienten realmente, que viven lo que les pasa.
Además, la base de cualquier buena novela son los personajes, ¿No? Sin ellos no habría historia. Sin ellos puede que sólo tuvieras un par de escenarios ambiguos.
Los personajes... ah, de los libros que he leído me gustan los que puedo opinar sobre estas personitas. En las que los puedo juzgar. En las que me encariño con ellos y luego sufres y luchas a su lado.
Prefiero esas novelas a las que
sus protagonistas, antagonistas o secundarios (da igual) son pura descripción.
Así que, lo dicho, es una tendencia de la que puedes sacar cosas buenas ^^
Y... me enrollo yo sola T_____T ¡Saludos desde aquí a Ayatito! ¡Y a Blane! ¡Y a Duncan, claro! *-*
Y muchos besitos para ti :)
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