Autora: Lorena Moreno Pérez
Editorial: Grupo SM
Palabras clave sobre el género: Realista, ficción, juvenil, esclavitud, amistad
Puntuación total: 3/5
Edición: 2/5
Narración: 3'5/5
Diálogos: 3/5
Personajes: 3/5
Relaciones: 3/5
Muchas veces he dicho que en España tenemos mucha suerte porque tenemos una generación de jóvenes escritores que vienen pisando fuerte y hay que agradecer la existencia de la Fundació de Jordi Sierra i Fabra que les rinde la oportunidad a los jóvenes de 18 años de publicar su novela y de ser aconsejados todos y cada uno de los participantes.
Las redes del infierno fue el ganador de la edición del Premio Jordi Sierra i Fabra de 2010 y en la pasada Feria del Libro de Madrid me hice con mi ejemplar para que la encantadora Lorena Moreno Pérez me lo firmara. No fue hasta el final de este año cuando pude hacerle un hueco entre mis lecturas para disfrutarlo.
Después de un primer capítulo en el que la autora nos introduce en el mundo del periodismo comprometido con las causas justas, nos arroja en el segundo capítulo a una situación que para muchos puede ser verdaderamente impensable en la época en la que vivimos: la esclavitud.
Conocemos a Meena, una niña que debería estar más ocupada en jugar y soñar que en la dura pesca del día o en si se despierta lo suficientemente tarde como para tener que utilizar la peor barca que el amo Nirad dispone para sus trabajadores. Ella y Nazia, su mejor amiga, fueron vendidas a su actual dueño, ahora deben cumplir la deuda con su trabajo. En algún punto de su mente, Meena ha aceptado su realidad como la única posible y no cree que haya nada raro en ello.
Es entonces cuando aparece Dhara, una joven que despierta el interés de varios de los guardias, que realiza su trabajo diligentemente y entretiene a Meena con historias de viajes increíbles que la hacen soñar. A medida que se van conociendo, nuestra protagonista se irá dando cuenta de la extraña actitud que Dhara tiene acerca del amo Nirad porque no siente miedo a los castigos ni a las amenazas.
Conocemos también a otros personajes como Savir Sabal, el heredero del imperio Sabal que debe empezar a relacionarse con los negocios de su tío Nirad; también Mitul creo que es un personaje importante ya que es un punto de inflexión en toda la situación. De todas formas creo que Dhara y Meena eclipsan a cualquier personaje con su tierna relación de amistad.
La escritura de Lorena me sorprendió muchísimo ya que con el tema que trataba consiguió aplicarle la cantidad justa de sentimentalismo consiguiendo alzar la voz contra la injusticia. Además se nota el trabajo que ha realizado para cuidar el contexto, sobre todo cuando realizan la visita a Denpasar consiguió que sus descripciones me absorbieran y me dieran ganas de visitar Bali.
Por último quiero resaltar ESE final tan impresionante que hizo que se me cayera el libro de las manos. Creo, además, que el capítulo 11 es una auténtica preciosidad que hizo que se me rompiera el corazón en millones de pedacitos pero no puedo hablar más del asunto porque creo que es mejor que lo descubráis por vosotros mismos.
Cita:
Las redes del infierno fue el ganador de la edición del Premio Jordi Sierra i Fabra de 2010 y en la pasada Feria del Libro de Madrid me hice con mi ejemplar para que la encantadora Lorena Moreno Pérez me lo firmara. No fue hasta el final de este año cuando pude hacerle un hueco entre mis lecturas para disfrutarlo.
Después de un primer capítulo en el que la autora nos introduce en el mundo del periodismo comprometido con las causas justas, nos arroja en el segundo capítulo a una situación que para muchos puede ser verdaderamente impensable en la época en la que vivimos: la esclavitud.
Conocemos a Meena, una niña que debería estar más ocupada en jugar y soñar que en la dura pesca del día o en si se despierta lo suficientemente tarde como para tener que utilizar la peor barca que el amo Nirad dispone para sus trabajadores. Ella y Nazia, su mejor amiga, fueron vendidas a su actual dueño, ahora deben cumplir la deuda con su trabajo. En algún punto de su mente, Meena ha aceptado su realidad como la única posible y no cree que haya nada raro en ello.
Es entonces cuando aparece Dhara, una joven que despierta el interés de varios de los guardias, que realiza su trabajo diligentemente y entretiene a Meena con historias de viajes increíbles que la hacen soñar. A medida que se van conociendo, nuestra protagonista se irá dando cuenta de la extraña actitud que Dhara tiene acerca del amo Nirad porque no siente miedo a los castigos ni a las amenazas.
Conocemos también a otros personajes como Savir Sabal, el heredero del imperio Sabal que debe empezar a relacionarse con los negocios de su tío Nirad; también Mitul creo que es un personaje importante ya que es un punto de inflexión en toda la situación. De todas formas creo que Dhara y Meena eclipsan a cualquier personaje con su tierna relación de amistad.
Por último quiero resaltar ESE final tan impresionante que hizo que se me cayera el libro de las manos. Creo, además, que el capítulo 11 es una auténtica preciosidad que hizo que se me rompiera el corazón en millones de pedacitos pero no puedo hablar más del asunto porque creo que es mejor que lo descubráis por vosotros mismos.
Cita:
Asomada por la borda, Meena observó cómo nadaban hacia el fondo hasta camuflarse con el color del mar. Lejos, muy lejos de ella, muy lejos de las redes…
2 comentarios:
Creo que tuve la suerte de estar en la entrega de Premios Barco de Vapor donde presentaron también a Lorena y pudo explicar su libro.
La verdad es que cuando lo contaba pensé que tenía una pinta buenísima y me entraron muchas ganas de leerlo, aunque no me había acordado hasta ahora. A ver si puedo hacerme con él pronto!
gracias por la reseña
=D Tengo muchas ganas de poder leer el libro de Lorena =) La verdad es que me llama mucho la atención y más al haber sido escrito por ella y con esa edad, que creo que demuestra muchas cosas.
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